miércoles, 28 de mayo de 2008


Profunda era
La mirada triste del pequeño abandonado
A la ingratitud de la pobreza
eterna cobijadora de sueños inalcanzables

Profunda era
La palabra del sabio ermitaño escondido
Entre montañas de mágicos libros
Verdaderos dueños del conocimiento imperativo

Profundo era
El beso suave derramado
de los labios maltratados y ahogados en vino.
confiado de verdades musicales eviternas

Profundo, era…

Y así fue como,
malamente
El niño ya crecido,
enriqueció.
El sabio, viejo enloquecido…
olvidó.
Y el beso… y el beso…

Y el beso…

Profundo era
CG

4 comentarios:

Sandra Rubio dijo...

Me alegro esté de vuelta. Se le echaba de menos, amiga.

Me puso la piel erizada de tanta belleza y derrota como derraman sus palabras.

Un beso.

Sandra Rubio dijo...

A ver si pasa a visitarme, que la echo de menos.

Sólo si tiene un hueco, se que a veces la vida nos mantiene ocupados.

Besos.

Jok€r dijo...

todo lo que sale de adentro es profundo un beso me gusto mucho tu post que andes bien

JR dijo...

preciosas palabras encadenadas con pensamientos
besos